Has leído bien, perros y gatos también nacen zurdos o diestros, ¿lo habías pensado alguna vez? Es verdad que con el tiempo lo que sucede es que tienden a adaptarse en función del manejo de quien los guía, pero desde luego es una información mucho más relevante de lo que parece.
Sí, sí… al igual que los seres humanos, los peludos también tienen claras preferencias laterales y conocer ese pequeño detalle (si es diestro o zurdo) podría ayudarte a entender un poquito mejor algunos de sus comportamientos y mejorar determinados aspectos de su aprendizaje y conductas.
¿Qué te parece si empezamos por el principio? ¿Qué significa ser zurdo o diestro para un perro? La lateralidad hace referencia a la preferencia de los peludos por un lado u otro del cuerpo, ¡hasta ahí todo entendido! En los peludos, se puede observar de forma muy sencilla en su comportamiento diario prestando atención a algunos gestos. ¿Cuáles? Por ejemplo, qué pata utiliza para dar la mano o para saltar o en qué pata se apoyan normalmente. Si es un perro es zurdo, preferirá usar siempre su pata izquierda, mientras que si es diestro, preferirá usar su pata derecha.
Hace poco varios estudios desvelaron que existen relación entre este factor (diestro o zurdo) con el carácter que tiene el perro en sí, su agresividad o incluso con su inteligencia. Resulta que los perros, al igual que los humanos, también tienen el cerebro dividido en dos hemisferios simétricos, y cada uno de ellos realiza funciones
bien distintas. Al parecer aún no se ha conseguido profundizar en los detalles (pues algunos estudios son ligeramente contradictorios), pero parece ser que el lado izquierdo gestiona sus emociones positivas y activas, mientras que el derecho gestiona las negativas, las respuestas a los estímulos del exterior.
¿Y cómo puedes descubrir si tu peludo es diestro o zurdo? Puedes hacer algunas pequeñas observaciones en casa, por ejemplo fijarte en qué pata utiliza para darte la mano; o cuando jugáis juntos a tirarle la pelota prestar atención y ver qué pata emplea para empujarla hacia ti o para intentar quitártela (utilizará aquella en la que tenga más fuerza). ¡Otra idea que le encantará! Esconde comida en una de tus manos y cierra el puño, fíjate en la pata que utiliza para quitarte la comida de la mano. ¿Buscas otra prueba más para descubrirlo? Un tip para los peludos “rebeldes” que no usan mucho las patas: si tienes escaleras en casa,
¿con qué pata comienza a bajar cuando vais a salir a pasear? ¿Y con cuál se impulsa para subir al sofá?
Al final, será zurdo si utiliza más su pata izquierda y diestro si utiliza más la derecha :)
Recuerda que cada perro es único (¡y eso nos encanta!) y puede tener diferentes preferencias, por lo que es importante respetar su individualidad y adaptar su entrenamiento y actividades en consecuencia. Lo más importante es que sepas que aprender sobre la lateralidad de tu perro puede ser una experiencia divertida y
enriquecedora para ambos, ¡atrévete!
