10 OLORES QUE ODIAN LOS PERROS Y QUE PUEDE QUE NO CONOZCAS

10 OLORES QUE ODIAN LOS PERROS Y QUE PUEDE QUE NO CONOZCAS
Son muchos los peludos que se pasan horas olfateando, pero ¿sabías que hay determinados olores en tu hogar que les horrorizan? Y no solo eso, sino que además pueden dañar su salud. ¡Te lo contamos en nuestro artículo!
Nuestros amigos de cuatro patas tienen un súper sentido del olfato, ¡de hecho es el sentido que más desarrollado tienen! Para que te hagas una idea, su olfato es entre 10.000 y 100.000 veces más potente que el nuestro. El lóbulo piriforme, que es la zona del cerebro que se encarga de analizar los olores, es 40 veces mayor al nuestro. Este lóbulo está muy cerca del área cerebral encargada de la memoria a largo plazo, ¡por eso los perros recuerdan con tanta facilidad un olor de hace muuuuucho tiempo!

Ahora bien, aunque todo esto es genial y tener esa “memoria olfativa” les reporta cosas muy positivas, también tiene algunas cosas malas para ellos. Por ejemplo, ¿cómo crees que percibe tu peludo el olor a amoniaco? ¿Y el de la colonia o el desodorante en spray? ¿Y el “flus flus” de un ambientador? Efectivamente, como una bomba olfativa.

Hoy te queremos hablar de 10 olores que los peludos odian y que puede que desconozcas. Y no son 10 olores muy raros, ¡no, no! Son olores que suelen rondar por casa, ¡allá vamos!

Los cítricos. 
Sí, sabemos que hay casos de perros a los que les encantan las naranjas o las mandarinas, ¡pero esto no es lo habitual!  Generalmente los cítricos les irritan las vías respiratorias y su aroma no suele gustarles demasiado. Tampoco los aceites esenciales cítricos, que al ser tan concentrados, aún les causan más repulsión.

La lejía.
Si de normal a ti ya te parece que tiene un olor fuerte, imagínate para ellos. Si tienes pensado limpiar la casa con lejía lo mejor es que tu peludo esté fuera de casa; aprovecha para que lo lleven al parque, a pasear… cualquier actividad que le aleje de este olor la máxima cantidad de tiempo posible.

Gel desifnectante.
Cuidado con esto, ¡y más en tiempos de Covid19! El olor del alcohol no les gusta nada de nada, además de que no es bueno para sus almohadillas (para aquellos que las limpian diariamente con alcohol). Cuando se haga una herida lávala bien con agua templada y jabón, recorta el pelito que puede haberse introducido en ella y cura son solución yodada disuelta en agua. ¡Pero no uses alcohol desinfectante sobre ella!

Quitaesmalte.
El principal problema del quitaesmalte para los peludos es la acetona, su olor les resulta realmente insoportable y muy muy fuerte. Así que, si vas a utilizarlo intenta optar por un quitaesmalte sin acetona (los venden en casi todos los supermercados), y de no ser así trata de no utilizarlo delante de él para que así su olor no le afecte lo más mínimo.

Guindilla y chile.
Ambos pimientos picantes tienen un compuesto químico denominado capsaicina, este les irrita las vías respiratorias, les produce picor continuado de nariz y estornudos constantes cuando lo huelen. Es más que evidente que no debemos darles ninguno de estos dos alimentos para que los coman, pero tampoco deberíamos dárselo a oler teniendo en cuenta todo lo que les producen.

Cigarros.
Aquí tenemos un combo bastante peligroso, ya que no solo les resulta desagradable el olor sino que además el humo les puede producir números problemas de salud derivados. ¿Como cuáles? Daño celular, cáncer y aumento de peso. Esta fue una de las últimas conclusiones a las que llegó la Universidad de Glasgow en su estudio.

Vinagre.
El vinagre posee un olor bastante fuerte que suele “espantar” a los peludos. De hecho, para algunos humanos resulta ligeramente insoportable cuando este está muy concentrado, ¡así que imagínate para los perros que tienen el olfato entre 10.000 y 100.000 veces más desarrollado! Son muchos los que lo mezclan con agua para eliminar las garrapatas y pulgas, pero dada la repulsión que los peludos sienten hacia este líquido nosotros no recomendamos exponerlos a este.

Perfume.
Que sí, que cuando tu hueles tu propio perfume piensas: “¡pero si es una maravilla!”. Pero a tu peludo no le gusta ni un pelo. Las fragancias están compuestas por una inmensa cantidad de ingredientes químicos, y estos tienden a irritarles las vías respiratorias. Y después sucede otra cosa muy particular para ellos, y es que cuando te rocías en perfume para ellos estás enmascarando tu olor corporal, que es el factor decisivo por el que él te reconoce.

Amoníaco.
¡Otro que tal baila! El amoniaco resulta muy fuerte para los humanos, de hecho algunos de nosotros no lo soportamos. Si tu perro inhala amoniaco esto le puede producir una fuerte irritación de las vías respiratorias y el esófago, así que ¡mejor no utilizarlo para nada! O si lo tienes que utilizar asegúrare de que tu amigo de cuatro patas está fuera de casa y que no tiene previsto volver en al menos un par de horas.

Naftalina.
La naftalina tiene factor doble de odio: no solo es un olor que odian los perros sino que además también es altamente tóxica para ellos. Si ingieren alguna de sus bolitas estas pueden llegar a producirles problemas muy serios en su organismo. Así que evita al máximo su uso o mantenlas lo más lejos posible de su alcance que puedas.