GATOS Y AGUA, ¿CUÁNTO HAY DE MITO Y DE REALIDAD?

GATOS Y AGUA, ¿CUÁNTO HAY DE MITO Y DE REALIDAD?
Vale, es verdad, en general felinos y agua no son mejores amigos. En esto estamos más o menos de acuerdo, ¿no os parece? Peeeero también hemos visto muchos videos y situaciones en los que los gatos disfrutan plácidamente de un baño, entonces: ¿cómo de cierto es eso de que tienen fobia al agua?

Seamos sinceros y sinceras, la inmensa mayoría de los gatos domésticos suelen ser enemigos del agua. Así que no es de extrañar que casi todas las personas que tenemos felinos no consideremos a nuestros amigos especialmente “acuáticos”. Pero, ¿a qué se debe esta aversión? Se supone que todo este “miedo” es debido a que son animales que han evolucionado en climas secos y áridos (provienen del Medio Oriente), con escaso contacto con ríos, lagos o mar. Hablando claro y yendo al grano: el agua solo para beber, nada más.

Algo que también se ha observado es que los felinos tienden a sentirse especialmente desprotegidos dentro del agua, precisamente porque dentro de ella no consiguen tener control de la situación. Y eso, sin duda, es algo que les frustra y asusta bastante.

Es verdad que, a pesar de todo ello, es normal ver cómo estos juegan con el agua de una forma muy sutil. Si por ejemplo abrimos un grifo no es de extrañar que rápidamente vengan para jugar con sus patas o que si ven la bañera llena a veces se asomen e intenten “cazar” alguna cosita, ¿verdad? Así que bueno, ahí encontramos una pequeña tolerancia ?

Sin embargo, a veces vemos videos de felinos que disfrutan felizmente y sin ningún tipo de miedo de un baño; y en esas nos preguntamos: ¿Cómo es posible? ¿Por qué a él sí le gusta y al mío no? Pues resulta que si desde pequeño se les educa y acostumbra, se puede llegar a convertir en algo placentero y completamente alejado del estrés.